Los medios españoles ya están avivando las apuestas. En este capítulo saldrán a escena Erwin (Artepref) y Emil (Almoradí Mahersol). Ambos deben, y desean puntuar. Pero la balanza de la presión siempre recae para el lado de los dueños de casa, que en este caso es el equipo del menor de los Feuchtmann.
En el partido de ida el Artepref logró un empate (30-30) en la cancha maldita de Almoradí. Maldita dicen los entendidos porque sólo el Mahersol gana, e incluso a los grandes como lo hizo el fin de semana pasado contra el Pozoblanco. Pero la historia es radicalmente distinta cuando el equipo del central chileno debe viajar. No han logrado ningún punto fuera de casa. Sólo están bendecidos en su pista.
Erwin hizo un completo y respetable partido en la casa de su hermano. Espera repetir la jugada, y quedarse con los dos puntos de la jornada, que los pondrían en una situación más acogedora en la tabla. Para muchos arandinos este partido es tildado como "el partido de la liga" y la "gran final", debido a la paridad de los puntos entre ambos planteles. Sin duda que será un gran partido porque se juegan puntos de liga vitales, se enfrentan dos hermanos, y porque se verán las cara de cerca ya que Emil defiende el dos en donde atacará su hermano. Si esto no es un duelo, ¿qué es? Acá un ejemplo de este duelo que llama la atención de las gacetas ibéricas:
Feutchmann contra Feutchmann
Otro de los alicientes del Artepref-Almoradí, además de la importancia de los puntos, se centrará en el enfrentamiento entre los dos hermanos chilenos que están actuando en la División de Plata. Emil en el Almoradí, Erwin en el Artepref.
Los Feuchtmann son una de esas sagas que vive por y para el deporte. Son cuatro hermanos y todos han destacado en el mundo del balonmano. El mayor y el pequeño se enfrentan este sábado en el Príncipe de Asturias, cada uno en un equipo diferente y con el único objetivo de sumar dos importantítisimos puntos para asegurar la permanencia en sus respectivos clubes. Pero ninguno de los dos puede olvidarse de ese pique deportivo familiar. Emil es el mayor, tiene 26 años y fue el que abrió el camino de sus tres hermanos pequeños. Le conocen como el Mago de Punta Arenas y es un central goleador y muy hábil. Erwin es el pequeño, tiene 19 años, y está causando una grata impresión en su primera aparición en la División de Plata con el Artepref. Ocupa el lateral izquierdo y acaba de salir de una lesión de tobillo. Dos hermanos y dos destinos, primero quedarse con los puntos y luego ganar la partida de los Feutchmann. ¿Quién se llevará el gato al agua?. Los Feutchmann tienen orígenes alemanes. El abuelo de la saga emigró a Chile desde Alemania a mediados del siglo pasado. Allí fundó una familia e importó el gusto por un deporte muy arraigado en centroeuropa, el balonmano. El padre de los Feutchmann fue seleccionador nacional y sus cuatro retoños están destacando en este deporte. Los tres varones juegan en España. Emil lo hace en el Almoradí, Erwin en el Artepref y Harald en el Vinarós de 1ª división. Luego está Inga Silke, que también actúa en un conjunto español, el Gran Monovar. Sin duda se habla y mucho de balonmano cuando todos se juntan para cenar en Nochebuena. La guinda podría cumplirse en los próximos Juegos Panamericanos donde los cuatro hermanos pueden ser seleccionados para disputar dicho campeonato con la selección chilena. Para Erwin “esto sería lo máximo. Los cuatro estamos trabajando para que llegue ese día. Para nuestro padre sería algo increíble y queremos dedicárselo” señala el jugador del Artepref. Antes, el derbi de los Feuchtmann en el Príncipe de Asturias. |
Uff....ya me gustaría ver a los cuatro hermanos en el panamericano de méxico, o antes en los odesur. sin duda una gran familia para el handball de chile.
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