El milagro del hándbol chileno
Chile debuta hoy en el Mundial Junior, la tercera cita que juega una selección este año.
por Diego Hermosilla P.
Ampliar
En las oficinas de la Federación Chilena de Hándbol no hay nadie. Más bien, no hay oficina. Los dirigentes tenían tal desorden, que fue desafiliada del COCh, que ahora mueve sus hilos. Hasta ahí, nada podría ser peor. Pero lo que mantiene vivo a este deporte son sus éxitos, pues pese al caos, sus selecciones han clasificado sólo este año a los Juegos Panamericanos, en damas y varones, además de los mundiales adulto de Suecia, en enero; Junior de Grecia, a fines de julio; y desde hoy, el Juvenil de Mar del Plata (el debut es ante Argentina). ¿Cómo es posible que un deporte sin cabeza visible tenga tales éxitos?
El balonmano ha sido desde siempre, o al menos desde que los actuales protagonistas recuerdan, una actividad dividida. A cada elección de directiva la seguía una inhabilidad y una denuncia sobre irregularidades. Sólo la última directiva se fue con $ 200 millones sin rendir al IND y otros 500 millones en deudas no pagadas, la mayoría de ellas por juicios perdidos, porque nadie tomó los casos. El presidente del COCh, Neven Ilic, es quien se hizo cargo de todo y quien comenta que "ha costado, pero lo hicimos porque siempre tenemos la idea de que los deportistas no sufran las consecuencias de lo que hacen los dirigentes". Han sido unos $ 200 millones los que ha puesto el Comité Olímpico este año para sacar adelante las selecciones y la idea es que en 2012 haya una nueva federación.
Aunque nada será fácil. No sólo la directiva saliente mantiene la idea de regresar, sino incluso otras anteriores organizan eventos bajo el nombre de Federación de Hándbol, hasta postulando a dineros públicos.
Los jugadores están felices con los cambios. Marco Oneto, del Barcelona, prestó toda su experiencia para ayudar a Ilic, mientras que los hermanos Feuchtmann (ver recuadro) también han celebrado las medidas.
Inga es parte de la selección que irá a Guadalajara, cuadro que hará una gira previa a España. "Antes, cuando mucho, íbamos a Mendoza", cuenta la jugadora.
Desde Nuremberg, el seleccionado adulto Emil Feuchtmann explica que los buenos resultados se deben al trabajo de profesores o gente aficionada, no necesariamente con cargos directivos. El mayor del clan destaca a "Hugo Valdebenito, Emil Feuchtmann padre, Iván Quiñones, Gerardo Reyes, Rodrigo Bown, Fernando Montalva... Mi opinión es que podemos llegar a ser una potencia. Ya lo somos en junior y juveniles y ahora vamos a lograr una medalla panamericana".
La "armada nacional"
Pese a la actualidad dirigencial, hay nueve chilenos jugando en Europa. Patricio Martínez y María Eugenia Musalem, en Austria; Rodrigo Salinas, René Oliva, Marco Oneto y Valeria Flores, en España; y Harald, Erwin y Emil Feuchtmann, en Alemania. Este último explica que "somos referente para los niños, que ven en el hándbol una alternativa laboral. Nosotros vivimos de esto".