El Zurdo Salinas

Nombre: Rodrigo Salinas Muñóz.

Edad: 20años.

Altura: 1,87cm.

Peso: 92kg.

Pelicula: Get Rich or Die Tryin.

Virtúd: Siempre estoy dispuesto a aprender.

Defecto: Ira.

Jugador que admiras: Ninguno.

Pasatiempo: Fútbol.

Nació en Viña del Mar. Estudió en el singular colegio Winterhill. Es moreno, alto y zurdo. Está última condición lo ha llevado a estar en dos clubes en su corta estadía en España. Primero, y gracias al apoyo de Emil llegó al BM Petrer de Primera Nacional. Allí sólo pudo jugar la primera parte de la temporada (marcó 47 goles), debido a los problemas burocráticos. Desde Chile su lucha por estar en este medio no acaeció. Es así como el 2008 firmó por el Pines Badajoz de la misma Primera Nacional. Consiguió buenos números en el ámbito personal, y le renovaron contrato para el actual ciclo 2009-2010.

Ya se siente como un veterano en su equipo. Sus despliegues ofensivos son los que más sorprenden. Lo igualan con la plasticidad del majestuoso Abaló. Pero el prefiere hacer de su propio nombre, un material de codiciado deseado por los más grandes clubes del handball. El camino no está fácil para los jugadores en España, pero ser zurdo siempre será una condición privilegiada.

Es bastante escueto en sus palabras, pero cuando debe actuar lo hace sin ningún tipo de reparo. Sus objetivos son grandes por lo que sabe que tiene que estar preparado para todo. Eligió este camino casi por vocación propia. Es el único de los cuatro hermanos que siguió esta carrera, pero aún hay esperanzas de encontrar otro Salinas internacional, en su hermano más pequeño.

¿Por qué irte de tu país, a jugar un deporte desconocido para la mayoría de los chilenos?

Desde pequeño me inculcaron el balonmano, tanto mi padre como toda mi familia, y claro mi gran entrenador Luis Martinez. Siempre tuve un gran interés por este deporte eso me motivó para seguir subiendo, y creciendo poco a poco hasta que llege al tope que se puede llegar en el nivel nacional. Sabia que mi destino, y mi deseo era ir a las ligas de Europa. Gracias al apoyo de mi familia, y la gente querida he podido conseguir.

Lo más fácil, y lo más difícil de estar en este medio.

Lo más difícil es la adaptación en general, tanto a nivel deportivo como urbano. En el balonmano el cambió es drástico porque lo que se juega acá y en Chile es muy distinto. Si no eres perseverante y trabajador te devoran.

Y lo mejor de acá es que siempre puedes crecer y aprender, y si te decides nunca tocas techo.

¿Dónde quieres llegar con todo tu trabajo?

Quiero llegar lo más lejos posible. Con mucho trabajo y trabajo, espero ganarme un nombre en el ámbito del balonmano a niveles mundiales, que me hagan estar en los mejores equipos del mundo.

¿Cuáles son tus proyectos a futuro, tanto personal como deportivo?

En este momento a nivel personal deseo crecer (siempre), luego mi deseo y el tiempo lo dirán todo. En lo deportivo mi proyecto a corto plazo es ascender a División de Honor con mi actual club, para luego dar el gran paso hacia ASOBAL.

¿Qué opinión te merece el medio donde naciste deportivamente, el de tu región?

Bueno, en la Quinta Región, y en todo Chile, el nivel del balonmano es muy precario. No hay seriedad ni profesionalidad. Pero claro, este no es sólo el mal de mi deporte, sino que de la mayoría de las disciplinas chilenas, excepto el fútbol.